Ci sarebbero il cavallo di Troia, il dipinto di 1040m², l’orologio che va al contrario, la maqueta 1:420 la ciudad como lo fue en 1830, el camino real con Negredo, albedo la dirección rubedo, Columna del Diablo, la Casa Fausto, el frente verde, la tumba de un enterrado vivo, el camello pasar por el ojo de una aguja, la columna sin fin de libros, il castello di Adele Bloch-Bauer, el Padrenuestro ascensor, por no hablar de todo lo demás que ya conoce, y entonces dame una buena razón, una sola, por qué no debería ir a Praga para patchwork Reunión.
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Nostalgia…
imagino, pero hay quienes tratan de 361 días al año (i 4 restante los pasa en Praga, como emigrante que regresa a casa de vez en cuando).
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